Los dientes del abuelo Valentín

Los dientes de mi abuelo Valentín
contaban cuentos desde un vaso con agua.

Yo esperaba a que todos estuviesen dormidos,
para encerrarme en el baño y escucharlos.

Había que prestar mucha atención y acercarse bastante,
Uds. saben lo complicado que puede ser hablar debajo del agua.

A veces repetía cuentos, como el del señor del restaurante que comía palillos, pensando que eran palitos de pan.
Ese era su preferido, tal vez porque tenía que ver con dientes
y con ingenuidad.

Otro era el de la estrella de mar que deseaba brillar en el cielo.
Ese le encantaba, tal vez porque tenía que ver con agua y con soñar.

Que fantásticos los dientes del abuelo Valentín,
los recuerdo y no dejo de sonreír.

9 comentarios:

La Currello dijo...

un poema...

Paula Yalú o Paula de Sebastián dijo...

Los dientes de Valentin tenian el poder del gato de Alicia?
El sonreia y todo desaparecia dejando solo una hilera de dientes flotando en el aire?

Carina Alfonso dijo...

Y además usaba sus dientes como teclas de piano, como ese gato chiflado!

Paula Yalú o Paula de Sebastián dijo...

Un gato musical!!!!!!!
Quiero uno!

Carina Alfonso dijo...

vos ya tenés dos que amasan ñoquis! o estarán tocando el pianito?

Anónimo dijo...

seguro tocan el pianito... como su tía, dicen que "la lambada" es su preferida...

Carina Alfonso dijo...

claro!, si son gatos caribeños!
el otro día vi a Sebastián con maracas!

Anónimo dijo...

caribeños como PICHU the coconut retriever!!!!!!!!, deberíamos presentarlos... cuándo vienen?!?!?!

Anónimo dijo...

nene me gusta tu blog
por cierto que buena foto esa del centro con guisela,
vestuarios ni se diga